Lo que pocos reconocen es que la Feria de La Sultana del Valle del Cauca, al sur-occidente de Colombia, con balcón al Pacifico y Departamento cañero por excelencia, en sus inicios se afincó como un festejo puramente taurino. El Coso de Cañaveralejo engalanado con lindas mujeres se enseñoreó como epicentro por muchos años y en la actualidad esa élite de aficionados se transmite cerradamente entre sus generaciones. Apunte para los salseros. Actualmente se celebra la edición 48ª del 26 al 30 de diciembre del 2005.
del puente para acá está Cali…¡Apué!"
La Capital del Pacífico colombiano fue fundada el 25 de julio de 1536 por el ibérico- de un pueblo de la región española de Extremadura- Sebastián de Belalcázar o más bien Sebastián Moyano que llegó a estas tierras del Nuevo Mundo en la flotilla del Almirante Colón en su tercer viaje. La historia no perdona, hoy día esta urbe cosmopolita está habitada por más de 3 millones de almas y los brazos de Cristo Rey siguen abiertos para recibir amablemente a todos sus visitantes. Aunque alguna prensa amarilla siga agitando su sensacionalismo barato para vender una imagen que no corresponde a la realidad. Vengan a Santiago de Cali y gócense una Feria y seguro regresarán.
Inicios
La versión 2005 de la Feria, corresponde históricamente a la número 48, eso quiere decir que sus comienzos datan del segundo lustro de los años 50s (1957) del siglo que se fue. Musicalmente, los raizales sostienen que a pesar de ser Santiago de Cali un asentamiento del Pacífico, su alma es antillana y mira hacia el Caribe. La savia le viene del puerto de Buenaventura que la contagió con su sabor africano. Los ancestros ratifican que sobre los muelles del primer puerto sobre el Mar de Balboa se descargó la melodía que infiltró a la villa del Adelantado Belalcázar.
Los cronistas en sus anales dejaron registros que la celebración de la primera Feria duró 1 mes. Los remates de las corridas o festejos taurinos en esos albores se realizaban en los grandes salones de los hoteles y clubes, citan: Club San Fernando, Hotel Aristi, Hotel Menéndez y Alférez Real que todavía son inaceptables las razones de su demolición. Toda una joya arquitectónica. La música que hizo gastar la suela brillando la baldosa para digerir la gastronomía criolla fue la antillana, la mal llamada tropical y la de las big bands colombianas de Pacho Galán, Lucho Bermúdez y Edmundo Arias. Entre la afro-antillana ocuparon sitial de honor: La Sonora Matancera, Trío Matamoros, Benny Moré y su Tribu, Gloria Matancera, Casino de La Playa, Riverside y la inacabable Orquesta Aragón entre tantas. El hermano país de Venezuela plantó bandera con sus gloriosa Billo´s Caracas Boys, Los Melódicos de Renato Carriles, Porfi Jiménez y Los Blancos. A partir de los 60s otra generación de patriotas llegó para quedarse: Nelson Henríquez, Pastor López, Emir Boscan, Ray Pérez con sus Kenyas y Nelson y sus Estrellas.
Hay quienes afirman que el género de la Pachanga, obra del cubano Eduardo Davidson- Claudio Cuza fue recibido por la muchachada de finales de los 50s con mucho alborozo y apuntaló los bailes domingueros que se conocieron como agüelulos o verbenas. A estas alturas nada de Salsa, aunque la fiebre ya estaba bajo las cobijas en NY. También, se vislumbraban la llegada masiva de las casetas o salones de baile, ya populares en las fiestas carnavaleras de Barranquilla y novembrinas en Cartagena de Indias. Claro que las reuniones familiares o caseras no se quedaron atrás.
Las Ferias y el boom salsero - Comienzos
Los musicógrafos locales y foráneos han concluido que es claro que el auge del Movimiento de la Salsa en una ciudad como Santiago de Cali, ubicada lejos del mediterráneo del Caribe es un caso atípico. La capital del Valle del Cauca si bien no sirvió de suelo para que el fenómeno se enraizara: Lo adoptó, lo hizo propio y lo fortaleció dentro del ambiente musical. No hay orquesta o artista que no desee venir a actuar en sus escenarios. Aunque, hoy la realidad sea muy distinta a los años 80s y primer lustro de los 90s. Otros aires musicales soplan y han contaminado los vientos salseros que refrescan sus farallones tutelares en donde habitan su fundador Sebastián, Cristo Rey y las emblemáticas Tres Cruces.
Durante los años 80s y los primeros años de los 90s, la ciudad alcanzó a ofrecer a sus rumberos un variado menú de más de medio centenar de agrupaciones que compartían tarima con las mejores bandas del concierto salsero, entre ellas: Gran Combo, Hermanos Lebrón, Ricardo Ray con Bobby Cruz, Oscar De León, Nacho Sanabria, Sonora Ponceña, La Selecta de Raphy Leavith, Jhonny Pacheco, Larry Harlow, Bobby Valentín, Conjunto Clásico de Los Rodríguez y sería interminable listar estas brillantes agrupaciones que arrancaron aplausos y pusieron a gozar al pueblo de la mano de las insuperables locales: Guayacán Orquesta de Alexis Lozano y Grupo Niche de Jairo Varela. Ídolos como Héctor LaVoe, Ismael Miranda, Cheo Feliciano, Jimmy Sabater, Joe Cuba, Héctor Casanova y muchos otros de la pléyade salsera de NY y PR permanecieron largas temporadas e incluso alguno de ellos grabó en sellos disqueros locales.
La Calle 5ta, Avenida 6ta, Estadio Pascual Guerrero del barrio San Fernando y los bailaderos (Salsotecas, barras, estaderos y discotecas) vieron desfilar a una interminable clientela de melómanos gozones que ávida de buena melodía asaltaban sus pistas.
Este periplo musical arrancó una frenética noche de diciembre de 1969 en la Caseta Panamericana que conducía el genial Sady Rojas. Su carpa artística se movió por cuanto festejo se realizó en Colombia y para el caso caleño se ubicó cerca al antiguo hipódromo, hoy Canchas Panamericanas por aquello de los juegos en 1971. Su tablado principal partió la historia musical de Santiago de Cali en dos: Antes de la presentación de Ricardo Ray y después. El cartel de temporada de Sady rivalizando con los de la cofradía taurina ofreció para esas calendas entre muchas a orquestas de la talla de: Francisco Pacho Galán- Rey del Merecumbé, Nelson y sus Estrellas de Venezuela, Los Graduados de Colombia con el Loco Quintero haciendo de las suyas, Los Corraleros del Majagual con Alfredo Gutiérrez a bordo- mejor acordionero o acordionista del Vallenato clásico de todos los tiempos- y lógicamente al teclista Ricardo Ray con su voz líder Bobby Cruz. ¡Vaya apague la luz y regrese al vacilón!.
Fue a punta de Jala Jala y Guaguancó que la rumba se prendió en los cuatro rincones de la ciudad y todo fue hasta que se rompa el cuero caballero. A partir de esa noche, le quedó la tierra fértil a Pacheco y a Masucci para que incursionaran con su agenda para la compañía Fania. La palabra Salsa rodó de boca en boca, aunque para muchos todavía el término no esté claro y lo incluyan equivocadamente como género musical. Eso ya será harina para otro costal.
Un hecho histórico innegable que catapultó el crecimiento del Movimiento Salsoso en los 80s en Santiago de Cali, fue indudablemente la economía de piso falso que se impuso por la influencia de las corrientes de dinero provenientes de asuntos relacionados con negocios asociados a los extintos Carteles de las Drogas. Algunos empresarios de fachada ganaron capacidad de pago y podían contratar sin agüero alguno a cualquier banda musical. Se multiplicaron los escenarios y abrieron lujosas discotecas para atraer a la clientela local y extranjera que se sentía y aún se siente atraída por el mito impostado a Santiago de Cali, como Capital Salsera del Mundo. Afirmación que debe ser motivo de un análisis más juicioso. ¿Y Caracas qué?. En lo personal no niego que la ciudad vivió una década (80s) brillante que marcó el paso. De allá a hoy… ya ha llovido y corrido mucho agua.
De las añejas ferias de la caña de azúcar con lujosas carrozas, desfiles típicos (Cali Viejo), bandas, personajes populares, verbenas de barrios y reinado de la caña: Poco queda. La modernidad y el consumismo le abrió las compuertas a la moda, sin importar su procedencia y consecuencias. Y sí: Todavía manda la Salsa en los grupos de melómanos y Asociaciones que surgieron como mecanismo de defensa del Movimiento Salsero ante la andanada de metal, otras raras mezclas y estridencias musicales.
Y aunque el atractivo de la Feria no se pierde por la visita de las bandas de vanguardia de lo que se puede rescatar todavía al raspar el caldero de la Salsa, los empresarios poco arriesgan porque la incertidumbre los abraza. Nuevos escenarios han surgido y las galas en el elegante Teatro Jorge Isaacs son frecuentes en el mes, aunque a precios muy elevados y al alcance de pocos. La alternativa son las salsotecas y emisoras universitarias como Univalle Estéreo 105.3 FM. Algunas de las comerciales tratan de enderezar el camino con el reciclaje sin criterio.
La moda comercial entró por la telefonía móvil que por encargo ha organizado los llamados super Conciertos de Feria con unas de cal y otras de arena.
Audiciones de barrio y Parque de La Música
Los salseros de corazón, levantados en armas musicales se organizaron desde hace más de una década para difundir cristalinamente el Movimiento y no dejarlo morir. Cada fin de semana en los parques de la ciudad los grupos programan a cielo abierto a sus preferidos en juiciosas temáticas que sustentan en sus viejos acetatos y ahora en CDs o DVDs.
Desde la primera audición en 1991 en el marco de una Feria a cargo del DJ y Productor Gary Domínguez, pasando por la legendaria Asociación de Melómanos y Coleccionistas de Música Popular de Santiago de Cali en una década de lucha se han multiplicado por toda la geografía del Valle del Cauca y el país. Recientemente, la Unión de Melómanos y Coleccionistas UNIMEL intenta enrolar y coordinar a los grupos que van naciendo.
El Parque de La Música es una ventana al universo salsoso. Durante los últimos 14 años de Feria, del 26 al 30 de diciembre, junto al Puente de Chipichape y en plena Avenida 6ta, los melómanos y coleccionistas concurren a la cita para disfrutar de las más variadas programaciones que incluyen a las más connotadas voces y bandas del Movimiento de la Salsa.
Invitados nacionales e internacionales adoban el panel de expositores de melodía para testimoniarle agradecimiento a su Majestad el Acetato, Salsa Universal, Noche Afro-antilana y a los Formatos Musicales con videos y remate con bandas sobre la tarima.
La asistencia se estima por cada velada entre 5 a 6 mil melómanos desde las 3 de la tarde a las 2 de la madrugada del día siguiente. Además, se ofrecen atractivos de compra y venta de acetatos, CDs, DVDs., Videos, instrumentos musicales, fotos, afiches y demás prendas y accesorios relacionados con el Movimiento de la Salsa. No faltan las bebidas tradicionales, cerveza, aguardiente y ron de la región. Capítulo aparte me merece el ofrecimiento de la gastronomía criolla como el mejor acicate para seguir en la beba durante los 5 días de Feria.
En el 2005, EKC Producciones y la Asociación de Melómanos y Coleccionistas de Santiago de Cali extienden invitación a que se programen para venir a una de las mejores ferias de América.
Esto es cuestión de pandebono y si por la Calle 5ta vas pasando levanta la vista que junto a ti bellas mujeres mueven sus caderas al compás de un buen tema salsero. El jugo de la caña se muele en plena vía para poner a bailar y a gozar al pueblo.
* Foto: Plazoleta de Los Poetas, ubicada junto a la mítica Ermita y frente al
galante Teatro Jorge Isaacs, en pleno corazón del Centro de la urbe
caleña.
Feria de Santiago de Cali, Colombia
Nur wenige sind sich bewusst, dass die "Feria de La Sultana del Valle del Cauca" im Südwesten Kolumbiens am Pazifik gelegen und Zuckerrohr Anbaugebiet par exellence, in ihren Anfängen ein reines Stierkampf-Fest war. Aktuell feiert man zwischen dem 26. und 30. Dezember 2005 die 48. Ausgabe.
del puente para acá está Cali…¡Apué!"
Die Anfänge
Es begann in der zweiten Hälfte des vergangenen Jahrhunderts, dem Jahre 1957.
Die Ansässigen behaupten, obwohl Santiago de Cali am Pazifik liegt, ist musikalisch die Seele Antillisch und der Blick auf die Karibik gerichtet. Der Ursprung kommt aus dem Hafen Buenaventuras, wo er mit seinem mit afrikanischen 'Sabor' angesteckt wurde. Die Überlieferungen bestätigen, dass auf den Piers des wichtigsten Hafens die Melodie entladen wurde, welche das Gebiet Belalcázars eroberten.
Die Chronisten vermerkten in ihren Unterlagen, dass die Feierlichkeiten der ersten "Feria" einen Monat dauerte. Diese fanden zu dieser Zeit in den grossen Salons der Hotels und Clubs statt.
Die "Ferias" und der Salsa-Boom
Während den 80ern und frühen 90ern schaffte es die Stadt seinen Rumberos eine vielseitige Auswahl von mehr als einem halben hundert Gruppen zu bieten, welche sich die Bühne mit den besten Salsa-Bands teilten, darunter befanden sich Gran Combo, Hermanos Lebrón, Ricardo Ray mit Bobby Cruz, Oscar De León, Sonora Ponceña, Jhonny Pacheco: Nicht endend wäre die Liste der brillanten, Applaus erntenden Gruppen, welche dem Publikum in nicht zu überbietenden Lokalen viel Spass brachten, beispielsweise Guayacán Orquesta von Alexis Lozanos und Grupo Niche von Jairo Varelas. Idole wie Héctor LaVoe, Ismael Miranda, Cheo Feliciano, Jimmy Sabater, Joe Cuba, Héctor Casanova und viele mehr aus dem erlesenen Salsa-Zirkel New Yorks und Puerto Ricos blieben lange Zeit und manche von ihnen nahmen sogar Platten unter lokalen Labels auf.
"Audiciones de Barrio" und "Parque de La Música"
Die wahren Salseros organisierten sich vor mehr als einer Dekade um den authentischen Salsa zu verbreiten. Jedes Wochenende spielen und diskutieren sie unter offenem Himmel über verschiedene Stücke, welche dann in ihre LPs bzw. heutzutage CDs/DVDs einfliessen .
Der "Parque de la Música" (Musik-Park) ist ein Fenster zum Universum der Salsa-Musik. Während der letzten 14 Jahre der Feria (26.-30.12.) strömen hier, dem Puente de Chipichape und der gesamten Avenida 6ta Musikliebhaber und Sammler zusammen, um die vielseitigsten Programme mit den bemerkenswertesten Stimmen und Gruppen der Salsa-Bewegung zu geniessen.
Der Saft des Zuckerrohrs wird auf offener Strasse gepresst und Falls du auf die Calle 5ta gerade läufst, blick um dich herum, schönne Frauen bewegen die Hüften zu eine gute Salsa.
* Foto: Plazoleta de Los Poetas, im Herzen der Stadt gelegen.
Foire de Santiago de Cali, Colombie
Ce qui peu de gens savent est que la Foire de la Sultana del Valle du Cauca
(Cali, 'La Sultane de la Valée', ainsi nommée par les natifs), au sud-ouest de
Colombie, un balcon au Pacifique, et un departement orienté à la production de
canne par excélence, était une célébration liée seulement aux taureaux au début. À
présent, on célèbre l'édition 40ème. du 26 au 30 décembre 2005.
del puente para acá está Cali…¡Apué!"
Le début
Les débuts datent du deuxième lustre des années 50 (1957) du siècle qui est fini. Parlant de musique, les naturels soutiennent que, malgré que Santiago de Cali est un emplacement sur le Pacifique, son âme est antillaise et regarde vers les Caraïbes. Sa sève à elle vient du port Buenaventura, que lui a transmis sa saveur africaine. Les ancêtres ratifient que c'était sur les môles du premier port sur la Mer de Balboa que la mélodie qui s'est infiltrée dans la villa de l'Adelantado (Gouverneur) Belalcázar s'est déchargée.
Les chroniqueurs ont enregistré sur leurs annales que la célébration de la première Foire a duré un mois. La finale des corridas ou les fêtes de taureaux avaient lieu aux grands salons des hôtels et clubs lors de ces débuts-là.
Les Foires et le boom de la salsa
Pendant les années 80 et les premières années des 90, la ville a pu offrir à ses rumberos un menu très varié de plus d'une demie centaine de groupements qui partageaient la scène avec les meilleures groupes du concert salsero: Gran Combo, Hermanos Lebrón, Ricardo Ray avec Bobby Cruz, Oscar De León, Sonora Ponceña, Jhonny Pacheco et il serait interminable de lister ces groupes si brillants qui ont arraché des applaudissements et ont mis le peuple à gozar (passer un bon temps) de la main d'artistes locaux suprêmes: Guayacán Orquesta d' Alexis Lozano et Grupo Niche de Jairo Varela. Des idoles comme Héctor LaVoe, Ismael Miranda, Cheo Feliciano, Jimmy Sabater, Joe Cuba, Héctor Casanova et beaucoup d'autres appartenant à la pléiade salsera de NY et PR y sont restés pendant des longues saisons et quelques-uns d'entre eux ont même enregistré pour des compagnies de disques locales.
Les auditions dans les quartiers et le Parc de la Musique
Les salseros à bon coeur se sont organisés depuis plus d'une décade pour diffuser bien authentiquement le Mouvement Salsa. Chaque weekend, dans les parcs de la ville, les groupes programment leurs favoris à ciel ouvert, et ils ont de très intéressantes discussions à propos d'eux qu'ils nourrissent de leurs vieux acétates et maintenant de CDs ou DVDs.
Le Parc de la Musique est une fenêtre à l'univers de la salsa. Pendant les derniers 14 années de Foire, du 26 jusqu'au 30 décembre, à côté du Puente (Pont) de Chipichape et en pleine Avenue Sixième, les mélomanes et les collectionneurs se rendent au rendez-vous pour jouir des plus variés programmes, lesquels comprennent les voix et les groupes les plus remarquables du Mouvement de la Salsa.
C'est une question d'identité, et si tu marches dans la Rue Cinquième, hausse tes yeux parce qu'il y aura de belles femmes remuant leurs hanches au rythme d'une bonne salsa près de toi. Le jus de l'eau-de-vie est moulu en pleine rue afin de mettre le peuple à danser et à jouir.
* Photo: Plazoleta (petite place) de Los Poetas (des Poètes), placée à côté de la mythique Ermita, face au élégant théâtre Jorge Isaacs, en plein coeur du Centre de Cali.