image by: Lourdes Nogueira

Resumen del Festival Internacional Jazz Plaza

El Festival Internacional de Jazz Plaza resultó un verdadero éxito con música de fusiones: jazz, salsa, timba, rock, samba, tangos, trova, música interactiva y hasta reguetones. Los organizadores buscaron la fórmula de presentar jazz en sus diversas posibilidades.

La apertura fue el primer plato fuerte, más de cinco Grammy en la escena: Chucho Valdés se presentó con músicos de su cuarteto, el bajista español Javier Colina, el guitarrista y cantante argentino Luis Salinas y la cantante Mayra Caridad Valdés.

El ensemble presentó un concierto fusionado con el jazz, lo afro cubano, el tango, el samba, la balada y los temas de la música standar. Chucho en sus ejecuciones siempre da una muestra de su perfecto entrenamiento en los breaks, los pasajes y rejuegos soneados y mambeados. y Luis Salinas demostró sus dotes guitarrísticos y su manera intimista de cantar. Javier Colina, con su oficio se integró a lo cubano “Aquí hay mucha música –me dijo al final, Colina- a ver si me contagio con algo”. “Para mí es un sueño tocar con Chucho, es lo más grande”, agregó Salinas. Por su parte, Mayra Caridad Valdés hizo su aporte, consagrada ya en el estilo feeling jazzeado con el impresionismo francés y con su potencia afro.

Martirio parece haber sido la decepción del festival, el público no quedó muy convencido de su presentación. Estuvo brindando algunos boleros cantados con un estilo diferente.
El concierto de pianos Homenaje a Tete Montoliu, demostró la fuerza pianística del patio con el monarca Chucho Valdés, Ernan y Harold López-Nussa, Rolando Luna, Alexis Boch, Dayramir González y la participación especial de Jao Donato de Brasil. Al final del concierto en el Amadeo Roldán, hizo aparición en el escenario Chucho Valdés, quien tuvo que complacer al público con una extensa pieza que tenía en sus alforjas sonoras.
Recuerdo la visita del pianista ciego Tete Montoliu en el festival habanero, donde me expresó su alegría de visitar Cuba, “tierra prometida de la música americana”. Recuerdo que le pregunté por Joan Manuel Serrat y me dijo: Ese muchacho es un genio, sin estudiar en ninguna academia lo hace todo bien en la música. El hecho de que yo toque bien no es nada sorprendente, estudié en un conservatorio con todo rigor, pero Joan Manuel es un músico impredecible”.

El concierto más esperado en el teatro mella resultó el encuentro de Pablo Milanés con Chucho Valdés. Mucho público tuvo que ver de pie el concierto. La alianza entre estos dos colosos de hacer un disco de canciones se remonta al 2002 cuando Chucho realizó un disco instrumental con sus melodías. Esta vez conciliaron los textos de Pablito para dar un toque distinto en un concierto en el que había mucha expectativa. Pablo también presentó algunos de sus temas más reclamados y Chucho ofreció algunas piezas su creación y por supuesto algunas de las canciones del disco entre amos. A la salida el crítico Frank Padrón sorprendido me dijo que este trabajo conjunto le exigió a Pablo un nuevo aire en las letras de las canciones, especialmente en las ricas armonías que Chucho elaboró con mucho interés.

El plato fuerte del festival estuvo centrado en Tania María que, hace 25 años, visitó La Habana donde se presentó en el patio de la Casa de la Cultura de Plaza. Su presencia en 1983, le dio categoría de Festival Internacional a este evento que había comenzado en 1980, con músicos cubanos. Tania tiene la fuerza de sus tradiciones, del samba, de lo afro y de una pericia instrumentística demostrada en todos estos años. Es una de las grandes del piano en Brasil y es muy reclamada en Europa por su estilo de tocar con la percusión brasileña que le da vida a sus ejecuciones, la acompaña Edmundo Carneiro.

En el concierto presentó un repertorio con temas de su infancia, temas estándar y del carnaval carioca, el bolero “Bésame mucho” y finalizó con la canción cubana “Babalú”, de Margarita Lecuona. En esta última pieza fue acompañada por Chucho Valdés, a dos pianos.
“Vine a Cuba a dar y a recibir –dijo Tania en esta nueva visita al festival. Chucho es muy grande y Cuba, lo mejor. Gracias a este festival maravilloso y a estos músicos grandes de Cuba”.
Desde hace cuatro años, el Festival organiza un Coloquio Internacional de Jazz, esta vez dedicado a José Luis Cortés que cumple 20 años con su Banda NG. José Luis es iniciador de este festival en una etapa de transición entre Los Van Van y Los Irakere.

Después de la ponencia de Neris González y Liliana Casanella, sobre NG La Banda, se presentó un panel donde escuchamos testimonios muy valiosos de César Pedroso (Pupy), la cantante Osdalgia y el baterista Giraldo Piloto. Chucho Valdés reconoció que “José Luis dio a Irakere el toque de alegría, entusiasmo y fuerza. Me ayudó en mi trabajo, en los metales, en los coros frente al público. El nació para la música, es un músico excepcional, el Rey de la Timba”.Al final se mostró, por Rosa Marquetti de la ESGAE, el documental Tosco, el Rey de la Timba, un documental donde se demuestra que José Luis Cortés es, como dijo Chucho, “un músico ya situado entre los grandes como Arsenio Rodríguez, Benny Moré, Ignacio Piñeiro.
El toque salsero y timbero se dejó para el patio de la Casa de la Cultura de Plaza (Calzada y 8), donde se presentaron las bandas de Klimax, Havana Ensemble, Manolito Simonet y NG La Banda. Cuba es la meca de la salsa y la timba y es natural que el festival de jazz muestra las mejores bandas habaneras que son de enorme atractivo internacionalmente.

Lo mejor del Festival resultó el conciertazo del año: El sábado, NG La Banda en el patio de la Casa de Cultura, donde se reunieron por vez primera músicos que han tocado en Irakere (Chucho Valdés y Enrique Pla), Los Van Van (Mayito Rivera, Joel Drick) y NG La Banda. Chucho se presentó sorpresivamente en medio de una descarga, nunca lo había visto con tanto ímpetu y brillantez; estaba ante sus alumnos, ante sus continuadores.
NG La Banda en los festivales de jazz ofrece un concierto desde lo clásico, hasta lo más rumbeado que hace mover al público más exigente. Del impresionismo de Ravel hasta la timba caliente. NG presentó su orquesta de flauta adjunta, ya resultan una verdadera compañía musical. Por ese motivo los críticos consideran a la Banda como “la mejor orquesta de salsa del hemisferio occidental” (Ben Tavera King/ San Antonio Express-News USA)
Algunos periodistas me preguntaron qué pintan las orquestas salseras en el Festival de Jazz. En el mundo es práctica cotidiana incluir el toque latino, caribeño o simplemente cubano; para dar vida a una música que se interrelaciona con los ritmos del mundo, especialmente con lo cubano. Desde hace 65 años el jazz se fusionó con las células cubanas, a través de Mario Bauzá, Frank Grillo (Machito) y después Chano Pozo, para concebir el jazz afrocubano, afrolatino o latin jazz. Por tal motivo, los organizadores de festivales de jazz incorporan bandas salseras y tradicionales con el fin de enriquecer el abanico de estilos y, sobre todo, para dar sabor y alegría a un evento que a, veces, puede estar perneado de “notismo” y “polrritmias” que aturden un poco a los oyentes.
Se esperaba “un festival muy fuerte”, me dijo Chucho en la conferencia de prensa y el evento resultó todo un éxito. El director artístico de Chucho me expuso los avatares que lleva un festival internacional, pero eso ha sido así desde sus comienzos en 1980.

Una de las inquietudes de los asistentes al patio de la Casa de la Cultura de Plaza (Calzada y 8, El Vedado), es el deseo de que vuelvan a situarse lo andamios que la gente le llama “La Guanajera”. Es lamentable que haya que pasarse parado seis horas de concierto sin las comodidades de un asiento. Uno de los organizadores me informó el pasado año que el alquiler de los andamios son extremadamente costosos. Me imagino que la Casa de la Cultura vaya en busca de una solución para futuras actividades que esperan presentar.

Por lo demás, esperamos el próximo Festival Varadero Jam Session que ya va tomando popularidad.

Festival Jazz Plaza 2008



Chucho Valdez

Chucho Valdez



Pablo Milanes
(Fotos by Lourdes Nogueira)