Roger Furrer: "Al principio existían pequeñas fiesta aisladas de los peruanos, mexicanos, brasileños... "

Con el éxito del Festival Caliente en Zurich, su creador Roger Furrer ha logrado darle un toque tropical a la ciudad. Aquí la historia narrada por él mismo.

Nací en Zurich de padres Suizos. Al cumplir los 5 años fuimos a vivir a Roma, donde realicé mi educación primaria y viví mi infancia. A los 12 años regresamos a Suiza, para continuar mis estudios de secundaria. Al terminar, realicé una escuela de comercio y paralelamente trabajaba en el banco.

A los 18 años ingreso a la compañía de discos BMG y aprendo lo que es promocionar discos porque esa era mi área de trabajo. Fueron mis tiempos de músico y al igual que cualquier joven, tenía ganas de tocar en alguna banda o formar una.

Me voy a Londres a trabajar con Island Records por algún tiempo. Regreso a Suiza y comienzo a trabajar en festivales y conciertos, paralelamente, yo era el representante en el aeropuerto, responsable de todos los vuelos de la compañía SSR Reisen que era la mayor organización de viajes para estudiantes en el país. Esto me dio la oportunidad de viajar a Latinoamérica.

En la selva del Amazonas
Así fue como empecé a ir a México donde pasaba viajando mucho con una novia. Posteriormente llegué más al sur: Perú, Bolivia, Brasil, internándome en la selva del Amazonas. Así recorrí Latinoamérica meses y meses cada año y conocí su música, empezando por el mariachi, el bolero, rock, y luego la música peruana, la boliviana y especialmente la brasileña.

Después de estos viajes y de regreso a Suiza, trabajo en festivales y conciertos pero ya no como músico sino como organizador. Para 1984 organicé el programa musical en un crucero que iba de Génova a Brasil con miles de suizos, llegando a Río justo se celebraba el festival "Rock in Rio" en enero del 85. Esto me inspiró a organizar un festival de música y escogí la isla de Ibiza en donde viví por algún tiempo. Fue un gran festival que duró una semana.

En el 89 traje a tocar en Ibiza a gente de Roxy Music y nos hicimos amigos con Phil Manzanera, el guitarrista y decidimos trabajar conjuntamente. Empezamos a producir discos, por ejemplo nuestro mayor éxito fue "Héroes del Silencio" que vendió millones de copias también en Alemania. Fue un super éxito.
Al regresar a vivir a Suiza empecé a traer artistas españoles que conocí en mis festivales de Ibiza y al tener aquí una gran comunidad española los presenté en el Volkshaus con llenos completos todo el tiempo. Artistas como Ducan Dhu, Luz Casal, Antonio Vega, Danza Invisible por nombrar algunos.

En 1990 fuimos al Festival de San Remo con Manzanera que además de ser manager de la disquera "Expresion" tocaba con su grupo. En el camerino de al lado estaba la orquesta Moncada de Cuba, grupo que pertenecía a la Universidad con estrecho contacto con Fidel Castro y la política. Ellos nos invitaron a Cuba.
Yo fui a visitar en el 90 por primera vez y luego decidimos hacer una gira que llamamos "Moncada-Manzanera" y en un bus recorrimos toda la isla pueblo por pueblo, Santa Clara, Santiago, la Habana, etc., tocamos muchísimos conciertos, era la primera gira con un artista internacional como lo era Manzanera en Cuba con un grupo cubano.



Roger Furrer al lado de la reina Celia Cruz ...


y antes de fundar el Caliente

El Clic Mágico
En 1991 conjuntamente con el Festival de Montreux empecé a traer grupos cubanos. En el verano de 1994 hicimos la primera gira por festivales con grupos como Clímax y Síntesis de Cuba, en Europa. En este año en Dinamarca, en Copenhagen después de nuestro concierto tocaron los Van Van, que yo ya conocía de Cuba. Yo estaba atrás del escenario y escuchaba la batería de Samuel Formell, hijo de Juan Formell. Este fue un momento muy especial, porque se dio el Clic Mágico. Se me pegó la fiebre de la salsa al escuchar su forma de tocar tan fuerte como una locomotora, como ellos la llaman, y el baterista es la máquina de la locomotora, con lo que quedé impresionado.

Así fue como pensé, que en vez de traer solo a grupos españoles, mejor hago una fiesta para todos los latinos que hay en Suiza. Existían pequeñas fiesta aisladas de los peruanos, mexicanos, brasileños pero nada en común.

Y en 1995 decido hacer la primera fiesta para los latinos en donde se reunieran todos los países. La primera fiesta latina la nombré "Caliente", la hicimos en el Kaserne de Zurich y se llenó a tope. Con este concepto de unir la música latina en un solo lugar nació el "Caliente". En 1997 decido llevar el Caliente al Volkshaus que era el lugar ideal para las necesidades que exigía el evento y en ese año pude contratar a Compay Segundo, paralelamente se dio el Boom de Buenavista Social Club, dándose como consecuencia que el Volkshaus explotara de gente.

Y así cada año fue creciendo, en el 99 vino la necesidad de utilizar Helvetiaplatz para el Mercado, en el 2000 necesitamos de toda la calle y el área de Kaserne y surge la idea de utilizar el tranvía como medio de promoción. En este año con la realización del segundo vídeo de Guillermo Fernández y las proporciones tan grandes que alcanzó el festival, logré la atención de la televisión suiza que se interesó de inmediato. En el 2001 hice un gran festival en Cuba: "Caliente en la Habana", con 40 conciertos. En el 2002 llegó la Radio Caliente en el 104.1 Mhz. FM con permisos de transmisión por un mes.

Para el 2003, el Festival crece tanto, que rompe records de participación del público, y los medios comentan que Caliente reúne a más de 100 000 personas y es considerado por las autoridades dentro de los eventos más importantes que se celebran cada año en el Cantón Zurich. En el 2004 festejamos los 10 años del Festival Tropical Caliente.

Caliente no solo son conciertos, sino que tiene su propia producción discográfica y desde el año 98 a la fecha, venimos haciendo las compilaciones que producimos en CDs como "Baladas" y "Salsa Clásica".

Hoy, como promotor, sigo luchando para vencer los problemas financieros y traer a nuevos e importantes grupos y artistas que hagan del Festival Caliente un evento atractivo a nivel internacional como se ha venido celebrando hasta nuestros días.